Estupor. Sorpresa. Conmoción y desenlace. Asi se llaman los 4 hijos de un director de cine Australiano quién quiso que ellos lleven en sus nombres algo de sus proyectos filmicos. Pero ese caso lo trataremos más adelante porque hoy debemos informar lo sucedido en un torneo barrial de fútbol infantil, donde abunda la típica mami de Baby Fútbol: Separada, con un hijo y con ganas de garcharse al técnico de su nene solo para mirar a los ojos a las demás mamis del club y decir por dentro "Me lo garché yo, je".
Luego de esta breve descripción importantísima, trataremos el caso de Javier Nazofácil. Un preso que estuvo 4 años planeando la huída perfecta para escaparse del penal donde habitaba al que fué llevado por robar un auto apuntando al conductor con una gomera.
Su vida dentro del penal siempre fué un martirio. En un sorteo Fué elegido como el empomador oficial del gordo Tirawaska un barrabrava de Laferrere poco asiduo a la higiene que medía un metro ochenta y pesaba 120 kilos. Eso sin mencionar que en las horas libres lo obligan tanto a él como a los demás presos mirar películas producidas por Pol-ka o Ideas del Sur. Un verdadero dolor de huevos es lo que pasa dentro de la cárcel por decirlo así.
Pero lo planeó todo para seducir a la libertad y abrazarse a ella. Durante 4 años cavó un túnel que lo dejaría en un descampado luego de salir de él. Pero la vida le mandó un sms, porque la vida tambén se moderniza y ya no te envía señales como antes, ahora la vida te manda sms pero él no quiso leer ese sms que decía "Pelotudo. El descampado ahora se convirtió en una canchita de fútbol. Ojo al piojo con eso".
Y que pasó? Intentó huir pero con tanta mala suerte que luego de fugarse del penal cayó en medio de un partido justo en el momento en que se ejecutaba un penal cobrado por el vigilante de Leonardo Buchi, el referí más odiado del fútbol infantil por su simpatía con el "Fino" Palacios a la hora de impartir justicia.
"La vida se vengó para hacerse notar. Le fué poniendo mas piedras en el camino", reza una canción de las pastillas del abuelo. Y así fué nomás.
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