El encargado de impartir justicia afirmó que no deja la tarjeta en su casa por temor a que la encuentre su mujer.
Ocurrió en la liga de Lobos, cuando Arturo Bonifacio se guardó la tarjeta de crédito en el bolsillo para que su mujer no la encuentre. Corría el minuto 26 del segundo tiempo entre los equipos Lobería y Sportivo Lechugones, cuando Bonifacio corrió a sacarle la tarjeta roja a un jugador de Lobería por intentar seducir al juez de línea.
"Bonifacio, el 9 de Lobería me invitó a salir después del partido", le comentó el juez de línea al árbitro del partido.
"Ah no!, te haces el vivito, esta es para usted señor", gritó Bonifacio al delantero, recibiendo como respuesta "Uh buenísimo, la tarjeta naranja de Visa. Gracias referí, el otro día no pude sacarla porque estoy en negro en este club de mierda. Le agradezco el gesto de regalarmela".
Bonifacio no pudo explicarle que en realidad quiso sacarle la tarjeta roja, porque cuando se dió cuenta del error el jugador 9 de Lobería ya le había manoteado la tarjeta de crédito y había salido corriendo a sacarle un triciclo a su hijo en 6 cuotas sin intereses.
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